Todos hemos oído alguna vez esa afirmación de que las mujeres no sabemos leer los mapas, aunque los que siempre suelen perderse suelen ser los hombres que porque por alguna extraña razón nunca quieren pararse a preguntar y siguen conduciendo en círculo durante horas mientras dicen cosas como "acabo de descubrir un atajo para llegar antes" o "ya estamos cerca, por aquí pasamos la otra vez".
Bromas a parte, la realidad es que durante mucho tiempo se ha admitido como cierta la inferioridad femenina en el campo de las matemáticas y de la geometría, sin embargo, los últimos estudios internacionales parecen desmontar estas ideas porque las notas de matemáticas de chicos y chicas tienden a equipararse, mientras que las diferencias de puntuación en las pruebas de lectura se amplían.
Si las chicas suelen tener peores notas que los chicos en matemáticas, no es porque estén menos capacitadas para el cálculo o la geometría que los hombres. Es sólo porque, en los países donde no hay igualdad entre hombres y mujeres —España, sin ir más lejos—, las chicas rinden en la escuela por debajo de sus posibilidades. Así lo demuestra un estudio internacional basado en datos de 276.165 alumnos de 40 países que presentó la revista Science.
El estudio analiza, por un lado, la diferencia entre las notas de chicos y chicas de 15 años en estos 40 países en las pruebas del informe PISA del 2003. Por otro lado, analiza la igualdad entre hombres y mujeres en estos mismos países a partir del Índice de Igualdad de Género elaborado por el Foro Económico Mundial y otros tres indicadores.
Cuando se cruzan ambos grupos de datos, se descubre que hay una correlación exquisita entre los índices de igualdad en un país y las diferencias entre chicos y chicas en las pruebas de matemáticas (véase gráfico).
Así, Turquía, el país analizado con un índice de igualdad más bajo, es donde las chicas tienen peores notas en comparación con los chicos. Pero en los países escandinavos, donde la igualdad aún no es absoluta pero es mayor que en ningún otro lugar, las notas de las chicas en matemáticas se equiparan a las de los chicos y, en el caso de Islandia, incluso las superan.
Estos datos reflejan las notas medias de toda la población masculina y femenina. Pero cuando se analiza sólo el 1% que tiene las mejores notas - lo que se podría llamar el grupo de los superdotados-, se observa la misma tendencia. En los países que han avanzado más hacia la igualdad, la cifra de chicos y chicas brillantes en matemáticas se iguala. Y en Islandia, por cada 100 chicos de la elite matemática, hay ¡117 chicas!
"Nuestros resultados indican que, a medida que evolucionemos hacia sociedades con mayor igualdad de sexos, las chicas serán cada vez mejores en la escuela", ha declarado por correo electrónico Luigi Zingales, coautor de la investigación de la Graduate School of Business de la Universidad de Chicago (EE. UU.). También han participado en el estudio investigadores de la Kellogg School of Management de Evanston (EE. UU.) y del Instituto Universitario Europeo de Florencia (Italia).
Estos resultados rompen con la teoría de que los hombres están más capacitados para actividades matemáticas como resolver ecuaciones o leer un mapa y las mujeres lo están más para actividades lingüísticas - una teoría que se basa en que, hasta ahora, las notas medias de los chicos son mejores en matemáticas y las de las chicas lo son en lengua-. En España, por ejemplo, las notas medias de las chicas en las pruebas de PISA de matemáticas del 2003 fueron un 2,5% más bajas que las de los chicos, pero en lectura fueron un 7% más altas.
Los datos del nuevo estudio coinciden con la percepción de profesores de matemáticas de las universidades Autònoma (UAB) y Politècnica (UPC) consultados para este reportaje. "Las capacidades de chicos y chicas son idénticas", resume Sebastià Xambó, decano de la facultad de Matemáticas y Estadística de la UPC. Pero en las tres universidades se observa que, aunque el número de hombres y de mujeres que cursan la licenciatura es similar, cuando se llega al doctorado quedan muchos más hombres que mujeres.
"No sabemos por qué ocurre esto", reconoce Manuel Castellet, catedrático de Matemáticas de la UAB. "Tradicionalmente, el mundo de las matemáticas ha sido muy masculino y a las mujeres les ha costado entrar", apunta Joan Porti, también de la UAB.
Más allá de las matemáticas, el estudio que se presenta hoy en Science analiza también la relación entre los resultados de las pruebas de lectura del informe PISA del 2003 y los índices de igualdad de sexos en los cuarenta países analizados. De nuevo se observa una correlación muy precisa entre las diferencias entre chicos y chicas en las pruebas y los índices de igualdad de cada país. Pero con una diferencia: en el caso de las matemáticas, donde las chicas partían de una media más baja, las diferencias entre sexos se reducen a medida que se avanza hacia la igualdad; pero en el caso de la lectura, donde las chicas parten de notas más altas incluso en situaciones de desigualdad, las diferencias se amplían.
Dos ejemplos: en Turquía, donde el sistema educativo no facilita que las chicas desarrollen todo su potencial, sus puntuaciones en lectura son un 5% más altas que las de los chicos; en Islandia, con un sistema más igualitario, la diferencia sube al 12%.
Por lo tanto, a medida que un país avanza hacia la igualdad, las notas de chicos y chicas tienden a igualarse en matemáticas, pero en las pruebas de lengua las chicas adquieren una ventaja cada vez mayor, concluyen los investigadores en Science."En conjunto, los chicos serán los que tengan desventaja", concluye Luigi Zingales. "Si esto llevará a que las mujeres acaben siendo mayoría en cargos de dirección de empresas o de responsabilidad política dependerá de cómo se desarrolle la igualdad en cada sociedad".
Fuente: La Vanguardia
Interesante entrada! Con tu permiso, voy a colocar este enlace en un artículo que acabo de escribir en mi blog acerca de las AA.CC. y el género femenino. www.soniahablandoenconfianza.blogspot.com
ResponderEliminarUn saludo.
Creo que la inteligencia linguística de los hombres que la poseen a un nivel alto se manifiesta más en hacer cosas como aprender varios idiomas solo y no tanto en las notas alcanzadas en exámenes; en mi país está medio mal visto que un hombre heterosexual estudie carreras llenas de mujeres, tales como los profesorados en Lengua y Literatura; hablar correctamente está considerado como de nerds que no se comen un rosco; preferir quedarse leyendo en casa antes que ir a tomar por ahí es "de maricas", etc.
ResponderEliminarDesconozco como es el tema en esos países acerca de la presión social hacia los hombres para que demuestren su "virilidad"; supongo que en ese sentido no varía mucho de otras sociedades; quiero decir que el feminismo tal vez solo esté logrando cosas únicamente para las mujeres. Hasta donde sé, el bullying hacia los varones es más violento en todas partes del mundo.